Notas sobre la receta
El yuzu (柚子) es un cítrico japonés que está atrayendo la atención de gastrónomos y chefs de todo el mundo gracias a su sabor único y a su versatilidad en la cocina. A menudo considerado un tesoro de la gastronomía asiática, el yuzu tiene una rica historia y unas características que lo convierten en imprescindible en muchos platos.
Originario de Asia Oriental, el yuzu se cultiva principalmente en Japón, pero también en Corea y China. Este cítrico, parecido a un pequeño pomelo, tiene una piel gruesa y un color que oscila entre el verde y el amarillo, según el grado de madurez. Los árboles de yuzu son resistentes al frío y pueden crecer hasta 2 metros de altura, produciendo frutos que suelen recolectarse entre noviembre y febrero.
El yuzu tiene un aroma intenso y un sabor picante y floral. Tiene un sabor único, a menudo descrito como un cruce entre limón, pomelo y mandarina. El zumo y la ralladura de yuzu se utilizan para realzar el sabor de los platos, añadiendo un toque de frescura y exotismo. En la cocina, el yuzu se puede utilizar de varias formas: como zumo, cáscara, o en forma de vinagre y aceite infusionado.
El yuzu es extremadamente versátil y se puede utilizar en una gran variedad de platos, tanto dulces como salados. He aquí algunos ejemplos:
Salsas: El yuzu se utiliza a menudo en salsas como el ponzu, que combina soja, zumo de yuzu y mirin, y añade profundidad de sabor al sushi y el sashimi.
Postres: A los pasteleros les encanta por su capacidad para añadir una acidez equilibrada a postres como tartas, sorbetes y cremas.
Bebidas: El yuzu también es popular en bebidas, ya sean cócteles, tés o limonadas, ofreciendo una refrescante alternativa a los cítricos clásicos.
El yuzu no sólo es delicioso, también es rico en nutrientes. Contiene mucha vitamina C, antioxidantes y flavonoides, lo que lo convierte en un excelente aliado para reforzar el sistema inmunitario y combatir los radicales libres. También es famoso por sus propiedades antiinflamatorias.
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